Una alimentación saludable es fundamental para mantener a raya esta patología, en especial en las fiestas navideñas.
La alimentación, en diabetes, es uno de los pilares fundamentales para tener bajo control la patología. Su importancia es tal que, antes del descubrimiento de la insulina en los años 20, ésta era la única vía, el único tratamiento existente para poder mantener la glucosa en equilibrio. Es necesario tener esto muy presente y concientizar la importancia de seguir unas pautas de alimentación en diabetes, como las que se detallan a continuación siendo una perspectiva que no se debe perder de vista a la hora que la tentación llega a nuestras mesas con la Navidad.
Alimentación sana en diabetes
Un plan de alimentación para la diabetes resulta clave y pasa por ajustar, en primer lugar, hábitos de alimentación saludables y, en segundo lugar, horarios de las comidas. Las personas con esta dolencia deben seguir un equilibrio entre sus alimentos, insulina y medicamentos, además de no descuidar el ejercicio físico.
Existen diferentes formas de poder llevar de manera adecuada un plan de alimentación saludable. La web de la Asociación Americana de Diabetes (ADA) recoge los dos más conocidos: «el método del plato» y «contar carbohidratos». Seguir estas líneas está bien, pero lo fundamental es consultar con el médico o nutricionista y, de manera conjunta, establecer unas pautas de alimentación que mantengan la diabetes bajo control.
Algunos de sus consejos pasarán por las siguientes indicaciones que deben procurar seguirse, a pesar de las fechas que se avecinan:
• Comer cinco veces al día y no saltarse ninguna de estas comidas.
• Evitar los azúcares de absorción rápida que contienen, por ejemplo, los dulces. Estos elevan de forma muy rápida la glucosa en sangre.
• Saber qué alimentos contienen hidratos de carbono de absorción lenta, que se encuentran en las legumbres, pasta, patatas y arroz, y que elevan el nivel de glucosa de manera más lenta. Gracias a ellos los niveles de azúcar en la sangre se mantienen más bajos y estables durante más tiempo.
• Incluir alimentos ricos en fibra, como fruta y verdura. Limitar los alimentos de origen animal e intentar que el consumo de pescado supere al de carne. Reducir las grasas de embutidos, quesos o mantequillas.
• Moderar el consumo tanto de alcohol como de sal.
• Y al cocinar, apostar por el aceite de oliva, aunque siempre será mejor hervir o cocer que freír.
Durante la elaboración de un menú pueden surgir dudas acerca de los alimentos que son recomendables incluir o la cantidad de hidratos que estos tienen. En estos casos, se puede consultar la página web www.diabetesalacarta.org, una iniciativa impulsada por la Fundación Alicia y el Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer (El IDIBAPS).
El proyecto cuenta con un equipo de médicos, enfermeras, dietistas-nutricionistas, investigadores, tecnólogos, cocineros y diseñadores, en el que cada uno aporta sus conocimientos para aconsejar sobre alimentación en diabetes.
¿Cómo seguir estas pautas en Navidad?
Esta puede ser la pregunta que se estén realizando ahora mismo muchos pacientes con diabetes. Las Navidades, en cuanto a alimentación, son unas fechas de tentación continua: donde hay un acontecimiento, hay una montaña de comida, dulces y bebida. Pero a pesar de lo que se pueda pensar, las personas con diabetes no tienen por qué eliminar todos los productos alimentarios típicos de Navidad de su dieta, aunque su consumo sí debe ser moderado
Todos los años se elaboran una serie de recomendaciones de cara a diseñar los menús de estas fiestas
• Primeros platos. Priorizar aquellos con bajo aporte de hidratos de carbono, como entremeses o marisco. Para los aperitivos o entrantes, optar por preparaciones con bajo contenido en hidratos y grasas. Algunas sugerencias pueden ser: verduras, ensaladas variadas, encurtidos, berberechos o mejillones al vapor, boquerones en vinagre, gambas, langostinos o sepia a la plancha o al ajillo.
• Platos principales. Se recomienda no abusar de los alimentos ricos en grasas y moderar las cantidades. Los productos al horno o a la plancha son una buena opción que, además, se pueden acompañar de ensaladas y verduras que incrementan la saciedad y aportan calorías y fibra vegetal.
• Bebidas. La ingesta de alcohol se debe limitar a una copa de vino en las comidas y a una de cava para el brindis, ya que este solo tiene «calorías vacías», aquellas que engordan, no alimentan y empeoran el control glicémico.
• Postres. Los mazapanes, turrones y otros productos navideños tienen muchas calorías y azúcares, por lo que se debe controlar la cantidad que se come seleccionando una o dos piezas y evitando el picoteo.
Estos días son para disfrutar en familia, por lo que se deben compartir con ella la mesa y el menú. En este sentido, es el propio paciente quien, en cada comida y cena, debe controlar las cantidades que ingiere. El apoyo de la familia también es fundamental, para que en casa se tenga en cuenta la realidad de la persona con diabetes a fin de diseñar un menú más adecuado a la patología. Todo esto será de gran ayuda de cara a respetar las pautas de alimentación y evitar caer en la tentación.